El fundador de la CTA y actual Diputado Nacional
por Unidad Popular (UP), Victor De Gennaro, habló en el programa radial “Vamos que
venimos” que conduce Javier Rivarola en Radio 21 de Caleta Olivia sobre el
protagonismo de la clase trabajadora durante la última dictadura militar hasta
el conflicto por la soberanía de las Islas Malvinas.
“El día 30 de Marzo de 1981
fue quizás la culminación de todas unas series de organizaciones y
movilizaciones de resistencia de los trabajadores, que empezamos en 1976 de
diferentes maneras a organizarnos” explicó Víctor De Gennaro en vista al
rechazo de la dictadura por parte de un gran sector de la clase trabajadora.
Y sigue: “Después del primer
intento de paro en noviembre del 1981 convocamos a la marcha del 30 de marzo a la Plaza de Mayo, y fue el fin
de la dictadura. El 30 de marzo cuando empezamos con: se va a acabar, se va a
acabar la dictadura militar y fueron miles, fue una batalla campal en el centro
de la ciudad de Buenos Aires”.
Agregó el coordinador
nacional de la
Constituyente Social que "en el país hubo movilizaciones
en Mar del Plata, en Córdoba, en Rosario, nos cobraron la vida de Benedicto
Ortiz, en Mendoza, y la verdad la población acompañó y hubo miles de detenidos.
El 2 de Abril, a la madrugada estaban todavía detenidos Raúl Boldini,
Secretario General de la CGT
de Brasil y Ricardo Pérez, Secretario General de Camionero, y los soltaron
cerca de las 11 de la mañana, en este contexto habían versiones
contradictorias, gente que querían ir a Plaza de Mayo que decían que las
Malvinas son Argentinas y gente que no".
“Otros por supuesto decíamos
que había que tener cuidado, que una guerra anti imperialista no la pueden
hacer los genocidas. Galtieri era defensor de Estados Unidos y formado en la Escuela de las Américas.
Todavía no teníamos claro si Aquino era uno de los represores de la ESMA o Astiz, no estaba tan
claro eso, pero sí sabíamos que eran los grandes represores y obviamente no se
podía confiar. El 2 de abril por suerte no fuimos a la Plaza de Mayo, se debatió
mucho en la CGT Brasil
resolvimos no ir, había algunos que estaban siendo convocados por Muñoz, un
relator de futbol del momento, José María Muñoz, que convocaba salgan a las
plazas hemos recuperado las Malvinas, y evidentemente el sentimiento era muy
fuerte, de esa causa nacional de las Malvinas, pero no fue casi nadie el 2 de
abril".
"Es muy importante este
detalle, el 2 de abril no se llenó porque ahí sí había desconfianza, el 10 de
abril, ya ocho días después, nuestros pibes estaban en las Malvinas, los
compañeros, los amigos, los hijos, los conscriptos, ya era otra cosa".
"Venia la flota inglesa
y llega Alexandre Haig a la
Argentina , que era el representante militar de Estados
Unidos, y planteó la firma de un convenio, en donde se admitían las tres
banderas, la norteamericana, la inglesa y la Argentina ”.
De Gennaro recuerda que en
ese momento había una lucha por quién controlaba los océanos, “se hablaba de la
guerra en las galaxias, la Isla
de los Soles, las Islas de las Malvinas en el Atlántico, cada uno en cada uno
de los océanos. Sin embargo, en Latinoamérica se apoyó nuestro reclamo de las
Malvinas, salvo Chile con Pinochet con su dictadura, no el pueblo chileno.
Después todos los países latinoamericanos fueron hermanos: los peruanos, los
brasileros, los cubanos, los mexicanos, los venezolanos hicieron un gran apagón
durante el conflicto bélico y toda Europa junta estuvo en contra”.
“Éramos cada vez más y yo
fui a la plaza llena y al llegar Haig en helicóptero fue chiflado muchísimo, y
salió Galtieri al balcón para parar el chiflido y dijo ’nosotros que estamos
viendo que viene la flota inglesa hacia las Malvinas, le decimos al principito
que venga, que vamos a dar batalla’ y fue una ovación, y ahí me sentí muy mal.
Me di vuelta y me estaba yendo, cuando dijo: ’cometí un error muy grave,
engreído yo como Presidente de los argentinos’. Y la plaza fue un chiflido
impresionante y la plaza empezó a gritar, ’borombombom, borombombom esta plaza
es de Perón; fue un cambio de un instante en la plaza que nadie organizó, eso
no estaba organizado por nadie”.
A mí me sorprende que los
historiadores no hablen de eso, es a propósito confundir el 2 de abril con el
10, me parece que como para decir que el pueblo podía estar peleando el 30 de
marzo que fue el fin de la dictadura, y el 2 de abril ya estaba apoyando. El
pueblo no es panqueque, el pueblo tiene sentimientos contradictorios, no digo
que no, pero a partir de ese día aparecieron las culturas populares, el rock
que estaba prohibido, vinieron delegaciones internacionales; en toda
Latinoamérica hacíamos actos en las esquinas, en las calles, con sindicalistas
latinoamericanos que nos venían a apoyar", recuerda De Gennaro.
Y sigue: "Bernardo
Neustadt, el periodista, fue un hombre siempre aliado a los sectores
reaccionarios que decía que a los ingleses le debemos la democracia porque nos
habían derrotado. Y se repite esto de desconocer el 30 de marzo a propósito;
porque el pueblo argentino peleó contra la dictadura”.
-¿Cómo ve la actitud del
gobierno nacional en los planteos diplomáticos para recuperar Malvinas?
Nosotros firmamos todos los
documentos de unidad parlamentaria, de relaciones exteriores, con respecto a
Malvinas, en eso no se puede tener ni un minuto de duda de la legitimidad de
los reclamos de soberanía, es uno de los últimos enclaves colonialistas que existe
en este siglo XXI y por eso las Naciones Unidas una y otra vez firman, votan,
instan a Inglaterra a cambiar esto, pero el gobierno es contradictorio porque
paralelamente firma convenios con la Barrick Gold entregando las zonas mineras que
está financiada con empresas que vienen de Inglaterra. Acá no se aplica
claramente que las empresas que tienen intereses en Malvinas sean castigadas en
el continente, ahí el gobierno no tiene una actitud acorde y consecuente, y que
nosotros acompañaríamos de mucho agrado. Además existe una norma que lo
permite, no es admisible que los sectores financieros que apoyan a actividades
de extracción, económica en Malvinas, tengan intereses en la Argentina ,
Así que me parece que el
gobierno ahí deja la responsabilidad de atacar el nudo central, que es la
economía. Los británicos no están ahí ni por la soberanía, sino por que es un
enclave económico financiero muy importante para habitar toda esa zona.
Hay que ser nacional en
todos los órdenes, lamentablemente el gobierno de Cristina Kirchner a aumentado
la dependencia del saqueo, de los recursos naturales y en estos momentos la
negociación por el fracking a nivel petrolero lo está mostrando con mayor
claridad. La renta minera, la renta sojera, la renta petrolera, la renta financiera
y lamentablemente una renta que crece en el país cada vez más que es la renta
del delito por tráfico y el juego, son rentas que se deberían defender en las
Malvinas y en nuestra Patria continental, pero con respecto a la soberanía de
Malvinas nosotros no tenemos nada más que apoyo a todos los pronunciamientos,
pero se debería ser coherente en todas las áreas.