CABA - En respuesta a la violenta represión sufrida
por parte de la
Policía Metropolitana durante la mañana de hoy en el Hospital
Borda, la
Asociación Trabajadores del Estado convocó a un Paro Nacional
para el próximo martes. Más de 50 heridos y ocho detenidos fue el saldo de la
brutal represión ejercida por la policía de Macri frente a la lucha de los
compañeros de ATE, que exigían que no se demoliera un taller del hospital. En
este momento, Julio Fuentes, Secretario General del Consejo Directivo Nacional
de ATE, se encuentra en la
Comisaría 4º junto a los abogados del sindicato, exigiendo la
liberación de los compañeros que fueron detenidos por luchar para evitar la
demolición del taller.
Entre los trabajadores que
se manifestaban contra el cierre de uno de los talleres del Borda, había
dirigentes de ATE Nacional, como Hugo Godoy, Secretario Adjunto; Mario Muñoz,
Director del Departamento de Asuntos Municipales; y Héctor Carrica, Director
del Departamento de Derechos Humanos. Por parte de ATE Capital Federal, se
encontraban presentes José Luis Matassa, Secretario General; y Humberto
Rodríguez, Secretario Adjunto, entre otros.
El clima de tensión comenzó
en la madrugada, cuando una fuerza de choque de la Policía Metropolitana
llegó junto a una cuadrilla de obreros enviada para tirar abajo un edificio en
el que los internos del Borda fabricaban sillas, mesas y camas. Frente a este
acto de evidente provocación, los trabajadores del hospital convocaron a
compañeros de ATE de otras clínicas, como el Hospital Moyano y el Garrahan, que
acudieron inmediatamente a colaborar con la resistencia. Poco a poco fueron
llegando compañeros de distintas organizaciones sindicales, sociales y
políticas, para engrosar las líneas de resistencia frente al embate contra lo
público que el macrismo insiste con llevar adelante en la ciudad.
Mario Muñoz, Director del
Departamento de Asuntos Municipales del CDN y trabajador del Hospital Moyano,
relató: “En la madrugada llegó la policía, como siempre escondida. Más de 500
policías con escudos y cascos, como todos pueden ver, ingresaron por la parte
de atrás del hospital. Rompieron las puertas del taller, sacaron algunas
maquinarias, las más grandes, y empezaron a tirar todo abajo con la topadora.
Después, cuando la gente vino a pedir explicaciones, lo primero que hicieron
fue responder con violencia. Hay muchos compañeros heridos y algunos detenidos.
Queremos que los liberen y que se vaya la policía, y que Macri se haga cargo de
este asesinato que ha hecho con el Taller 19, porque ha dejado a mucha gente
sin trabajo y a pacientes sin tener un lugar a donde volver a aprender los
oficios que aprendían. En el taller se enseñaba herrería y tapicería, y había
un taller de luthier para que los pacientes aprendieran a arreglar instrumentos
musicales. Muchas de las cosas que hacían los pacientes servían como mobiliario
para los mismos hospitales: Sillones, mesas, sillas, camas, roperos. Macri terminó
con todo eso para llevar adelante un negocio inmobiliario con la construcción
del Centro Cívico”.
Los balazos de goma, los
palazos y el gas pimienta no se hicieron esperar demasiado: Cuando la línea
policial empezó a verse rodeada por cientos y cientos de compañeros, y a pesar
de no tener una orden legal de disolver la movilización, los efectivos de la
fuerza de seguridad macrista arremetieron contra hombres y mujeres con total
brutalidad, y sin tener en cuenta que entre los manifestantes se encontraban
además internos del Borda y familiares de los mismos. Más de cincuenta personas
resultaron heridas, entre ellas José Gherbesi, camarógrafo de El Trabajador del
Estado, que recibió tres balazos de goma a pesar de sólo estar ahí registrando
los hechos.
Sin ningún tipo de
justificación, la policía detuvo además a ocho compañeros, que fueron llevados
a la Comisaría N º
4. Una de las compañeras detenidas fue Carina Maloberti, Vocal del Consejo
Directivo Nacional de ATE, que se encontraba en la primera línea frente a la
policía. En estos momentos, el Secretario General del CDN, Julio Fuentes, está
en la comisaría junto a los abogados del sindicato, Juan Carlos Capurro y
Matías Cremonte, para exigir la liberación de los compañeros.
Durante los hechos, el Secretario
General de ATE Capital Federal, José Luis Matassa, dijo frente a los medios:
“Actúan impunemente. Hay compañeros enfermeros y delegados que han sido
lastimados. Tienen armas pesadas y gases lacrimógenos. Se puede ver a través de
todas las cámaras que vinieron a ver cómo reprimían a los trabajadores.
Nosotros solamente queremos transitar por este hospital, que es libre para
todos los trabajadores y la comunidad. Esto es por el proyecto del Centro
Cívico, que venimos repudiando los trabajadores desde hace muchos años, y que
con la pelea del 2012 logramos frenar. Queremos al responsable, sea Mauricio
Macri o la Vicejefe
de Gobierno. Que se hagan presentes y que hablen con los trabajadores”.
“A esta gente no le
interesan ni la salud pública, ni los trabajadores, ni los neuropsiquiátricos.
Lo único que les interesa es un negocio inmobiliario. Por eso vinieron, entre
gallos y medianoche, a tirar abajo el Taller 19” , dijo Gustavo Lerer,
Delegado de ATE en el Hospital Garrahan. Quien, al ser consultado por un golpe
que tenía en la cabeza y que le manchaba de sangre el guardapolvos blanco,
dijo: “El dolor no es en la cabeza, sino que es en el corazón, porque están
destruyendo la salud pública, y a nosotros, que dejamos la vida en el hospital.
Les pegaron a las compañeras enfermeras, que todos los días se la pasan
atendiendo a los pacientes. A la compañera Susana Tranquera la tiraron al piso
y la patearon”.